La increíble primavera del fenómeno esloveno analizada a través de estadísticas que lo ponen a la altura de los más grandes de la historia
'Monarquía absoluta: una de las mejores campañas clásicas de la historia'. Este es el titular de la portada de L'Équipe tras la última victoria de Tadej Pogačar en la Lieja-Bastoña-Lieja, el broche de oro de una primavera histórica para el campeón esloveno.
Los números son impresionantes: nueve Monumentos ganados (uno más que su rival Mathieu van der Poel), lo que lo coloca al mismo nivel de leyendas como Fausto Coppi, Sean Kelly y Costante Girardengo, en el tercer lugar histórico solo por detrás de Eddy Merckx y Roger De Vlaeminck.
Pero hay más: Pogačar se convirtió en el primer corredor de la historia en lograr seis podios consecutivos en los Monumentos y solo el tercero, después de Merckx y Kelly, en terminar entre los tres primeros en los primeros cuatro Monumentos de la temporada.
Su última Lieja, ganada a una media récord de 41,983 km/h, elevó su porcentaje de victorias en Monumentos al 47% (9 victorias en 19 salidas). En los últimos 16 Monumentos que ha disputado -excluyendo su abandono por una caída en Lieja 2023- nunca ha quedado fuera del top cinco.
Un dominio que rompe todas las barreras
Pogačar rompió lo que parecía un tabú en el ciclismo moderno, convirtiéndose en el primer ciclista desde Merckx en 1975 en ganar el Tour de Flandes y el de Lieja en la misma temporada. Su capacidad para mantener su condición durante casi dos meses, desde la Strade Bianche hasta Lieja, es algo único en el ciclismo contemporáneo.
El esloveno lo admitió.