Un curioso episodio marcó la novena etapa de la Vuelta a España , con Tom Pidcock (Q36.5) revelando un acalorado intercambio con João Almeida (UAE Team Emirates) durante la persecución de Jonas Vingegaard en la subida final.

El británico dijo que Almeida le gritó que "tuviera coraje" mientras los dos intentaban cerrar la brecha con el danés de Visma-Lease a Bike , que estaba haciendo una escapada en solitario hacia la línea de meta.

"Me sentí muy bien cuando Ciccone y Jonas arrancaron. Obviamente, siempre es difícil seguir a Jonas cuando hay cuatro compañeros entre él y tú", explicó Pidcock. "Pensé que la rueda de Almeida era perfecta para seguir, con la esperanza de remontar. Pero me quito el sombrero ante él; no pude hacerle ningún cambio. Estaba gritando, pero es como un tractor, sobre todo al llegar a la zona llana".

A pesar de la tensión, Pidcock logró un excelente segundo puesto, que lo catapultó al cuarto puesto de la clasificación general , a 1:35 del líder, Torstein Træen. Este es un resultado importante para sus ambiciones de terminar entre los 10 primeros en Madrid.

"Es difícil conocer al máximo mis capacidades; a veces soy un poco cauteloso, pero hoy sin duda me ha dado confianza para las etapas más duras que quedan", comentó el británico, que también aspira a una victoria de etapa que sería su primera en una Gran Vuelta desde su triunfo en Alpe d'Huez en el Tour de Francia de 2022.

El equipo Q36.5 está a la altura de las circunstancias, trabajando duro para su capitán, junto con Lidl-Trek, para controlar la carrera. "Me están dando el 100% y estoy increíblemente agradecido por ello", concluyó Pidcock. "Es un gran grupo y nos lo estamos pasando genial".