En el Campeonato Mundial de Ruta UCI 2025 en Kigali se produjo un giro dramático: Julian Alaphilippe, dos veces campeón del mundo, se vio obligado a retirarse después de solo 31 kilómetros de la carrera de ruta élite masculina.

El ciclista francés, que había mostrado signos de recuperación tras su reciente victoria en el GP de Quebec, intentó un par de sprints entre el pelotón antes de rendirse y abandonar, deslizándose por la parte trasera del pelotón entre los coches de equipo. Según informes posteriores, Alaphilippe sufría una intoxicación alimentaria.

2025 resultó ser un año de altibajos para el francés de 33 años: después de su éxito en Quebec, su primer triunfo en más de un año, ya se había visto obligado a abandonar el siguiente GP de Montreal.

Pero no acaba ahí la cosa: poco después del abandono de Alaphilippe, una caída a gran velocidad en un descenso obligó a abandonar la carrera a otros ciclistas de élite, entre ellos Ilan van Wilder (Bélgica), medallista de bronce en la contrarreloj hace unos días, y el español Marc Soler.

Francia ahora tendrá que depender de jugadores no convencionales como Pavel Sivakov y Valentin Paret-Peintre, así como del joven talento Paul Seixas, de 19 años, que debuta en el campeonato mundial profesional. Antes del inicio de la competición, el holandés Sam Oomen también se retiró por enfermedad, lo que redujo el contingente holandés a cinco.